La Iniciativa presentó un documento con insumos para la elaboración del documento de elementos de la Cuarta Conferencia Internacional sobre Financiación para el Desarrollo – FFD 4.
El FFD 4 hará seguimiento a los mecanismos de financiación para el desarrollo acordados hace diez años en la Agenda de Acción de Addis Abeba, que reconoció la necesidad de cumplir con la partida oficial para el desarrollo, con énfasis en los países menos desarrollados, y fortalecer la cooperación Sur-Sur.
La conferencia se realizará entre el 30 de junio y el 3 de julio de 2025 en Sevilla, España, y abordará cuestiones emergentes, con énfasis en la implementación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible y la reforma de la arquitectura financiera internacional.
Los insumos que presentamos se enfocan en dos ejes: problemas transversales, como la transición energética y la equidad de género, y la movilización de recursos domésticos.
Por un lado, consideramos que la triple crisis interplanetaria es el primer punto de acción de la financiación para el desarrollo. Además, que toda estrategia se base en el Derecho Internacional de los Derechos Humanos, el cual está basado en un marco legal estructurado y legítimo, y cuya priorización impide el riesgo de perpetuación de desigualdades a la hora de financiar los procesos que se acuerden. En especial, recalcamos el deber de proteger los derechos de las mujeres y niñas, quienes soportan más cargas estructurales debido al desajuste entre las obligaciones de derechos humanos relevantes para la financiación global y su implementación real.
Por otro lado, recordamos que la movilización de recursos domésticos requiere del combate contra los flujos financieros ilícitos y una sólida cooperación fiscal internacional. Asimismo, los estados deben garantizar la justicia social en sus políticas fiscales, lo cual se traduciría en una carga progresiva con un fuerte impacto redistributivo. Enfatizamos en que estos objetivos se pueden lograr mediante la tributación a los superricos, la tributación efectiva a las multinacionales y la alineación entre el FFD 4 y la Convención de las Naciones Unidas para la tributación internacional. Todo esto, sin olvidar las obligaciones de derechos humanos, el deber de transferir tecnología y conocimiento de los países más ricos, y la búsqueda de soluciones a los problemas que la deuda soberana ha generado en materia de derechos humanos.
Esperamos que los insumos presentados sean relevantes para los co-facilitadores e incluidos en el Documento Final de la Conferencia.